El delegado de la Junta en Talavera, David Gómez, y el alcalde de Montearagón, Teodoro Jiménez, han presentado este jueves en Talavera de la Reina la XVIII edición de la Feria Medieval del Vino de Montearagón, una Feria que, como ha destacado el delegado, «cumple su mayoría de edad cada vez con más visitantes» y que «ha conseguido abrirse un hueco en un sector muy difícil dada la alta competencia que hay».

La Feria Medieval del Vino de Montearagón, ha añadido David Gómez, ha conseguido atraer a las mejores bodegas de la DO Méntrida e incluso a otras de Castilla-la Mancha. Esto significa que «es una Feria consolidada, que atrae al público interesado en la enología y en la que las bodegas encuentran un espacio donde se dan a conocer y hacen negocio», según ha informado la Junta en nota de prensa.

Ha resaltado también el delegado de la Junta en Talavera la incidencia que este evento tiene en un sector tan importante como el turismo, puesto que «la Feria se configura también como un modelo de turismo gastronómico donde poder degustar los alimentos de gran calidad que producimos en la comarca de Talavera, como son el queso, los higos, los embutidos, el aceite o la miel».

Asimismo, Gómez ha querido mostrar su solidaridad con los afectados por la DANA, que ha impactado de lleno en el corazón de esta Denominación de Origen.

Será los días 30 de septiembre y 1 de octubre próximos cuando se celebre en Montearagón la XVIII edición de la Feria del vino, una fiesta declarada de Interés Turístico Regional que reúne cada año a miles de visitantes que quieren disfrutar de los excelentes vinos de la DO Méntrida y de los productos típicos de Talavera de la Reina.

La Feria contará con más de 20 estands de bodegas y distribuidores que ofrecerán degustaciones de sus caldos, entre ellos Condes de Fuensalida, Viñedos de Camarena, Bodegas Alonso Cuesta, Luis Mariscal, Bodegas Garva, Bodegas Arrayán, Bodegas Canopy-Consul o Bodegas y Viñedos González.

Además, habrá una zona de restauración con food trucks que servirán platos elaborados con los alimentos de calidad de Talavera de la Reina como el jamón, el queso, el aceite o la miel.

Los asistentes también podrán participar en dos talleres de cata de vino comentados por el sumiller Jesús Chicharro, que les enseñará a apreciar las características organolépticas de los diferentes tipos de vino. Asimismo, podrán asistir a la representación de la «Llegada de las vendimiadoras», una recreación histórica que muestra cómo era el proceso de elaboración del vino de pitarra en el pasado.

La Feria no solo es un evento enológico y gastronómico, sino también cultural y familiar. Por eso, habrá una zona de talleres y exposiciones de aperos y oficios de antaño, donde se podrá conocer el patrimonio etnográfico de la zona; una zona de cetrería, donde se podrá admirar el arte milenario de la caza con aves rapaces; una zona de artesanos, donde se podrá adquirir productos hechos a mano con materiales naturales; y una zona infantil con campamento y juegos para los más pequeños.

La Feria del vino de Montearagón es una oportunidad única para descubrir los sabores y aromas de una tierra con tradición vitivinícola y gastronómica, así como para disfrutar de un fin de semana lleno de diversión y cultura. El cartel, diseñado por Lucas Fernández, diseñador local de Talavera de la Reina, refleja el espíritu festivo y acogedor de esta cita imprescindible para los amantes del buen vino.

«MÁXIMA PROTECCIÓN» A LA CERÁMICA Y LOS BORDADOS

Por otra parte, David Gómez ha puesto en valor la aprobación por el Parlamento Europeo del Reglamento de Protección de Indicaciones Geográficas de Productos Artesanales Industriales que va a permitir dotar a la artesanía de Castilla-La Mancha y, en especial, a la Cerámica de Talavera y Puente del Arzobispo y a los bordados de Lagartera y de la Campana de Oropesa con el nivel más alto de protección de toda la Unión Europea, junto a productos como el cristal de Bohemia o la porcelana de Limoges.

David Gómez ha destacado que, con ello, se «va a permitir garantizar la calidad y autenticidad de los productos vendidos en la Unión Europea, impidiendo las falsificaciones y que nadie se beneficie de la calidad única del trabajo de los artesanos de nuestra comarca».

Incidiendo el delegado en que se protege «ese saber hacer que se ha ido decantando durante siglos de tradición, incentivando la innovación y la inversión y ayudando a los artesanos y artesanas a promover y proteger sus conocimientos técnicos tradicionales en los 27 estados miembros de la Unión Europea».

De igual modo, ha añadido, «salvaguarda y desarrolla el patrimonio cultural y garantiza a los consumidores una información fiable».