El Ayuntamiento de Guadalajara ha sacado adelante sus últimos presupuestos de esta legislatura, cuentas para 2023 que se elevan casi a los 91 millones de euros y que han sido aprobadas con los 13 votos a favor del equipo de Gobierno (PSOE y Cs) y el voto en contra de todos los partidos de la oposición (PP, Vox, UP-IU y Aike), durante un pleno donde los ‘populares’ han anunciado que acudirán a los tribunales para recurrirlos por considerarlos «nocivos».

Tal y como anunciara en una intervención previa a la aprobación de las cuentas el portavoz ‘popular’, Jaime Carnicero, al no prosperar su enmienda a la totalidad y en base a los informes técnicos, su grupo presentará una reclamación a estos presupuestos por considerarlos «nocivos» para la ciudad de Guadalajara, y, en caso de no prosperar, acudirán a los tribunales.

Carnicero ha abundado en que, «si se acude a los tribunales por ingresos deficientes tendrá que informar el Tribunal de Cuentas una vez más», y «les tendrán que dar en las narices». «Estas cuentas son una copia de las del pasado año» y recogen también «enormes carencias e irregularidades», ha subrayado.

Un presupuesto que, además, recoge un incremento de más de un 25% en el gasto estructural del Ayuntamiento de Guadalajara, lo que, en palabras del portavoz ‘popular’ son más de 10 millones de euros.

Una sesión plenaria en la que se han rechazado las enmiendas a la totalidad presentadas por los grupos PP, Vox y Aike y gran parte de las enmiendas parciales que presentaron la formación ‘popular’, Aike y UP-IU, formación esta última a la que si le han apoyado alguna de ellas.

Las cuentas han sido defendidas por la concejala de Economía y Hacienda, Lucía de Luz, que ha explicado que crecen en un 8,6 por ciento hasta casi los 91 millones de euros, empujadas por la expansión empresarial que vive la ciudad y que reflejan «estabilidad, ilusión y el despegue económico» de la ciudad.

De Luz ha hecho hincapié en la importancia que para este equipo de Gobierno tiene el área de Bienestar Social, donde ha crecido la partida un millón de euros, y también ha resaltado cómo, un año más, se ha suspendido la tasa de terrazas, y que, además, «ya no hay barrios de primera y de segunda» porque en todos hay inversión. Estas cuentas «generan confianza, son sociales, y están centrados en las personas», ha subrayado.

Para la edil de Economía, se trata de los presupuestos que necesita la capital y, frente a las críticas de la oposición, ha asegurado a los ciudadanos que «pueden estar tranquilos pese a los malos augurios porque la hacienda municipal es más fuerte que nunca», pidiendo a Carnicero mayor humildad.

Por su parte, desde la formación Ciudadanos, que gobierna conjuntamente con el PSOE, su portavoz, Israel Marco, ha considerado que se trata de unas cuentas «expansivas» y que, frente al «inmovilismo y el conservadurismo» que defendía la anterior Corporación, ahora se impulsa el gasto en la ciudad, se desarrollan los polígonos y llegan nuevas empresas. «Esto son ya hechos», ha dicho.

Una intervención en la que ha arremetido especialmente contra el portavoz del PP, Jaime Carnicero, reprochando a su formación «el jardín sin flores» que les dejaron, pero asegurando que hoy, ese jardín ya tiene flores.

Desde Vox, su portavoz, Antonio de Miguel, ha justificado la enmienda a la totalidad de su grupo entendiendo que se trata de unas cuentas «irresponsables, irreales y despilfarradores», que no contemplan partidas destinadas a afrontar los problemas reales de Guadalajara.

Por parte de Unidas Podemos-IU, su portavoz y único edil, José Morales, tampoco ha mostrado su voto favorable a estas cuentas porque no se han apoyado sus políticas de vivienda, como de la misma forma ha hecho Aike, cuyo portavoz y también único concejal, Jorge Riendas, ha insistido en varias ocasiones en solicitar la devolución de las cuentas «a los corrales» por considerar que se han hecho «con prisas desde el primer día».