Presidente de Cortes, más partidario de acuerdos para sacar temas nacionales de la Cámara que de reformar el reglamento

El presidente de las Cortes, Pablo Bellido, se ha mostrado más partidario de llegar a acuerdos entre los grupos parlamentarios sobre la necesidad de sacar los asuntos nacionales del debate de la Cámara castellanomanchega que de reformar el reglamento de la misma.

A preguntas de los medios en el desayuno informativo que este viernes ha ofrecido, no ha precisado cuál podría ser la fórmula parlamentaria para materializar este consenso y ha indicado que la manera de articularlo depende de los miembros de la Junta y la Mesa de las Cortes.

«Lo que fuera preciso», ha expresado Bellido preguntado por si una declaración institucional conjunta entre los grupos parlamentarios pudiera ser una buena herramienta.

En todo caso, ha remarcado que suplantar «los temas que gestionan otros» representa una «falta de respeto a la separación de poderes» y provoca que «el debate se embarre».

C-LM NO ESTÁ COMO EL CONGRESO

A pesar de esta crítica, ha señalado que «la situación en el Parlamento de Castilla-La Manccha» por el momento no se acerca al contexto del Congreso de los Diputados, foro en el que el tono es muy radical.

«Ha habido momentos de cierta tensión que me incomodan, pero no creo –que el tono del Congreso– se haya instalado aquí», ha afirmado.

Siendo realista, ha indicado que la gravedad del tono parlamentario no se va reducir, con elecciones municipales y autonómicas a la vuelta de la esquina. «Me extrañaría que en año electoral esto se reduzca».

Por todo ello, ha pedido moderación a los diputados nacionales de todo el arco político, porque tampoco se siente orgulloso de lo que algunos parlamentarios socialistas están expresando estos días en el Congreso.

¿REPETIRÍA COMO PRESIDENTE?

De otro lado, preguntado por si repetiría como presidente de las Cortes, ha afirmado que «uno debe estar a disposición para ayudar» y no debe «colocarse en la casilla de salida», por que así «las decisiones políticas, a quien corresponda, se toman con mayor libertad».

A pesar de que ha definido esta legislatura como «muy estrambótica y muy difícil», se ha mostrado «muy agradecido por esta oportunidad» y ha definido ser presidente de las Cortes como «un viaje muy bonito».