Aike Guadalajara pide que la zona roja siga como tal y que se alargue la gratuidad media hora

GUADALAJARA, 23

El Grupo Municipal Aike anuncia una enmienda a la totalidad y enmiendas parciales con respecto a la Ordenanza de Estacionamiento Limitado y Controlado de Vehículos redactada por el equipo de Gobierno (PP y Vox) y que irá a pleno el próximo viernes, donde pedirá que la zona roja siga como tal y que se alargue media hora al mediodía la gratuidad en estas zonas, es decir, que en vez de ser desde las 14.00 horas a las 16.00 horas, sea de las 14.00 a las 16.30 horas.

Así lo ha anunciado la portavoz y única concejal de Aike en el Ayuntamiento de Guadalajara, Susana Martínez, que, acompañada de Jorge Riendas, ha señalado que seguirán insistiendo en la sesión plenaria de este viernes porque tras la comisión celebrada este martes en Junta de Gobierno «no se ha mejorado nada», algo que no quieren desde su formación.

Y si bien se encuentran «medianamente satisfechos» porque parte de sus enmiendas han sido admitidas, desde Aike son conscientes de que hay que «evolucionar» y por ello animan a los guadalajareños, especialmente a los residentes del centro que se van a ver perjudicados porque se va a poder aparcar en la zona roja, a que pase lo que pase el viernes, aleguen porque «esto mermará sus derechos». Así, desde esta formación solicitarán igualmente, al igual que lo hará el Grupo Socialista, que la zona roja siga siendo lo que es, como ocurre en la mayoría de las ciudades.

La portavoz de Aike ha recordado también que la Ordenanza de Estacionamiento Limitado y Controlado de Vehículos redactada por el equipo de Gobierno (PP y Vox) y que irá a pleno el próximo viernes para su aprobación aumentaba inicialmente hasta 2600 el número de plazas de zona azul y el horario y ha cambiado los usos de la zona roja, perjudicando a los vecinos residentes.

Una ordenanza que para Aike tenía un «afán claramente recaudatorio» ya que «ni mejoraba la movilidad en la ciudad ni las condiciones de uso para sus vecinos», y «ahora se han tenido que autocorregirse y recular».

Para Martínez, está claro que han «confundido a la población», considerando una «irresponsabilidad y una falta de rigor en la gestión de lo público y de respeto a la ciudadanía» la forma en la que se ha actuado pues «no se han hecho las cosas para beneficiar a la ciudad sino solo con un afán claramente recaudatorio», ha concluido.